Cómo reclamar los créditos impagados de tu empresa
En las relaciones comerciales y jurídicas, tanto para personas físicas como para sociedades mercantiles, uno de los problemas más comunes y preocupantes es el impago de deudas.
Cuando se agotan las posibilidades de llegar a un acuerdo amistoso entre acreedor y deudor, la opción más efectiva es recurrir a los litigios para reclamar los créditos impagados.
En este artículo, exploraremos las diferentes vías legales disponibles para la reclamación judicial de deudas. También abordaremos algunas de las dudas más comunes que surgen cuando el acreedor decide reclamar sus créditos impagados ante la Justicia.
¿Qué es un litigio?
Un litigio es un procedimiento legal mediante el cual se resuelve una controversia o conflicto entre dos o más partes.
Para que exista un litigio, es necesario que haya:
- Un conflicto entre las partes.
- Sometimiento de dicho conflicto ante un juez o tribunal.
- Un procedimiento reglado que se debe seguir.
Esta vía judicial es distinta de otros mecanismos, como los recursos ante la Administración Pública o la mediación, ya que garantiza la intervención de un juez para resolver la disputa.
El litigio como herramienta para la reclamación de créditos impagados
En el ámbito del Derecho Civil y Mercantil, el litigio es una de las principales herramientas que tiene un acreedor para reclamar judicialmente una deuda.
Una vez agotadas las soluciones amistosas, el acreedor puede acudir a los tribunales para obtener una resolución judicial que le permita satisfacer su crédito con los bienes y derechos, tanto presentes como futuros, del deudor.
¿Qué es el Juicio Cambiario?
El Juicio Cambiario es un procedimiento especial que permite la reclamación de créditos impagados cuando la deuda proviene de títulos cambiarios, como letras de cambio, cheques o pagarés.
Este juicio es rápido y limita las posibilidades de defensa del deudor, lo que lo convierte en una opción eficaz para el acreedor.
El procedimiento se inicia mediante una demanda acompañada del título cambiario, que debe cumplir con los requisitos formales establecidos en la Ley Cambiaria y del Cheque.
Si el juez verifica que el título es correcto, se requiere al deudor que pague la deuda en un plazo de 10 días hábiles y, además, se ordena el embargo preventivo de bienes suficientes para cubrir el importe de la deuda.
Posibles escenarios en el Juicio Cambiario:
- Pago por parte del deudor: Se levanta el embargo, pero el deudor debe asumir las costas del proceso.
- Incomparecencia o impago: Se procede a la ejecución de la deuda, convirtiendo el embargo en ejecutivo.
- Oposición del deudor: El deudor puede presentar una demanda de oposición cambiaria, pero sus motivos de oposición están limitados por ley.
Ventajas y desventajas del Proceso Monitorio
El Proceso Monitorio es otro mecanismo eficaz para la reclamación de deudas, utilizado principalmente cuando el acreedor tiene una deuda documentada y no existe límite en la cuantía a reclamar.
Ventajas del Proceso Monitorio:
- Sin límite de cuantía: Puede emplearse para cualquier tipo de deuda, independientemente de su monto.
- Rápido y sencillo: Solo es necesario presentar los documentos que acrediten la deuda.
- Ejecución directa: Si el deudor no responde al requerimiento, se puede ejecutar la deuda directamente sobre los bienes del deudor.
Desventajas del Proceso Monitorio:
- Domicilio del deudor: Es fundamental que el domicilio del deudor sea correcto. Si no se le localiza, el proceso se archiva.
- Oposición del deudor: Si el deudor presenta oposición, el procedimiento se convierte en un juicio declarativo, lo que puede prolongar la resolución del caso.
Conclusión
Para reclamar los créditos impagados de tu empresa, es fundamental escoger el procedimiento judicial más adecuado en función de las circunstancias del deudor y la deuda.
El Juicio Cambiario y el Proceso Monitorio son opciones rápidas y eficaces, pero requieren una evaluación previa de las posibilidades de éxito.
Si el deudor es localizable y es poco probable que se oponga a la reclamación, el Proceso Monitorio puede ser la mejor opción.
Sin embargo, si existen dudas sobre su localización o se espera una oposición, puede ser preferible optar directamente por un juicio declarativo.
Además, si el deudor se encuentra en otro país de la Unión Europea, es posible recurrir al Proceso Monitorio Europeo, una herramienta diseñada para simplificar la reclamación de deudas entre países miembros.
En cualquier caso, contar con un asesoramiento legal y económico para empresas especializado es clave para asegurar una reclamación exitosa y eficiente.