Un juicio civil en España sigue fases ordenadas: demanda, admisión, contestación, audiencia previa (solo juicio ordinario), vista y sentencia.
Según la Ley de Enjuiciamiento Civil (Ley 1/2000, de 7 de enero), el plazo para dictar sentencia es:
- 10 días en el juicio verbal.
- 20 días en el juicio ordinario.
¿Qué es un juicio civil en España?
Un juicio civil es el procedimiento mediante el cual se resuelven conflictos entre particulares.
Su estructura y plazos están regulados por la Ley de Enjuiciamiento Civil (Ley 1/2000, de 7 de enero).
La ley distingue dos tipos de procesos: juicio ordinario y juicio verbal, con tiempos diferentes, especialmente al dictar sentencia.
Visión general del juicio civil en España
El proceso civil español no es un único acto, sino una secuencia ordenada de pasos.
A grandes rasgos, el itinerario es el siguiente:
- Presentación de la demanda.
- Admisión y traslado al demandado.
- Contestación a la demanda.
- Audiencia previa (solo en juicio ordinario).
- Vista o juicio.
- Sentencia.
La Ley de Enjuiciamiento Civil estructura estas fases y fija plazos concretos, con un objetivo claro: combinar rapidez (celeridad) y seguridad jurídica.
En materia de tiempos, destacan dos plazos clave:
- 10 días para dictar sentencia en el juicio verbal.
- 20 días para dictar sentencia en el juicio ordinario.
Marco legal: la Ley de Enjuiciamiento Civil
La norma básica que regula el juicio civil es la Ley de Enjuiciamiento Civil (Ley 1/2000, de 7 de enero).
Esta ley determina:
- La estructura de los procedimientos.
- Las fases del proceso civil.
- Los plazos procesales de cada actuación.
Además, diferencia dos grandes tipos de proceso declarativo:
- Juicio ordinario.
- Juicio verbal.
En ambos casos, la ley fija plazos específicos para dictar sentencia.
Aunque la información facilitada se centra en estos plazos finales, la ley también regula los tiempos de cada fase intermedia: contestación a la demanda, proposición de prueba, recursos, etc.
Fases de un juicio civil en España y orden cronológico
A continuación se describen las principales fases del juicio civil en España, comunes a juicio ordinario y verbal, con las particularidades más importantes.
Presentación de la demanda
El proceso comienza cuando la parte que reclama un derecho presenta la demanda ante el juzgado competente.
En esta fase:
- Se expone qué se pide al juzgado.
- Se justifican los hechos.
- Se fundamenta jurídicamente la pretensión.
La ley exige requisitos formales y materiales para que la demanda pueda ser admitida. Si no se cumplen, el órgano judicial puede pedir subsanación o incluso inadmitirla.
Admisión de la demanda y traslado al demandado
Una vez presentada, el juzgado revisa la demanda.
Si cumple los requisitos legales, se admite a trámite.
Tras la admisión:
- El tribunal da traslado al demandado.
- Se le comunica el contenido de la demanda.
- Se le concede un plazo para contestar, fijado por la Ley de Enjuiciamiento Civil.
Esta fase garantiza el derecho de defensa del demandado, que debe conocer exactamente qué se le reclama y por qué.
Contestación a la demanda
La contestación es la respuesta formal del demandado.
En ella puede:
- Negar los hechos alegados por el demandante.
- Aportar su propia versión de los hechos.
- Plantear excepciones procesales.
- Oponerse jurídicamente a la pretensión.
En el juicio ordinario, el plazo habitual indicado en la información disponible es de 20 días para contestar a la demanda.
Y en el juicio verbal, ese plazo es más breve, aunque el dato concreto no se detalla en la información proporcionada.
Audiencia previa (solo juicio ordinario)
La audiencia previa es una fase propia del juicio ordinario.
Se celebra después de la contestación a la demanda.
En esta audiencia se persiguen varios objetivos:
- Depurar qué hechos están realmente discutidos.
- Resolver cuestiones procesales pendientes.
- Intentar un acuerdo entre las partes, si es posible.
- Fijar los medios de prueba que se practicarán en el juicio.
Es, en la práctica, una fase clave para organizar el procedimiento y centrar el debate.
Vista o juicio
La vista es el acto central del procedimiento.
- En el juicio verbal, tras la contestación a la demanda, el juzgado da traslado a las partes para que propongan prueba en el plazo de 5 días. Una vez recibidas las propuestas, el tribunal decide si es necesaria la celebración de vista. Si ninguna parte la solicita y el juez tampoco la estima necesaria, el procedimiento queda concluso para sentencia. Si se celebra vista, en ella se proponen y practican las pruebas pertinentes y se formulan conclusiones, tras lo cual el juez dictará sentencia en el plazo de 10 días (o de 5 días en los juicios de desahucio).
- En el juicio ordinario, la vista se celebra después de la audiencia previa.
Durante la vista:
- Las partes exponen sus argumentos orales.
- Se practican las pruebas admitidas (documental, testifical, pericial, etc.).
- El juez o tribunal valora directamente lo que oye y observa.
Tras la vista, el procedimiento queda listo para sentencia.
Sentencia
Finalizada la vista, el tribunal debe dictar sentencia.
Aquí es donde la Ley de Enjuiciamiento Civil fija los plazos más claros:
- Juicio verbal: el juez tiene 10 días para dictar sentencia.
- Juicio ordinario: el plazo es de 20 días desde la terminación del juicio.
Estos plazos están expresamente establecidos en la Ley de Enjuiciamiento Civil (Ley 1/2000, de 7 de enero).
La sentencia pone fin al proceso en esa instancia y resuelve si se estima o se desestima la pretensión del demandante.
En el juicio verbal, el tribunal puede pronunciar la sentencia oralmente al concluir la vista (art. 210.3 LEC).
Plazos de un juicio civil en España: cuánto tarda cada fase
Aunque la información disponible se centra en los plazos para dictar sentencia, la Ley de Enjuiciamiento Civil regula muchos otros plazos.
Entre ellos:
- Plazos para contestar a la demanda.
- Plazos para proponer pruebas.
- Plazos para interponer recursos.
Estos plazos pueden variar según:
- El tipo de procedimiento (ordinario o verbal).
- La naturaleza concreta de la actuación procesal.
En todo caso, los plazos cumplen dos funciones esenciales:
- Evitar dilaciones indebidas.
- Garantizar la seguridad jurídica y la tutela judicial efectiva.
Diferencias entre juicio ordinario y juicio verbal en España
La diferencia entre juicio ordinario y juicio verbal no es solo terminológica.
Responde a la complejidad del asunto y a la necesidad de rapidez.
- Juicio ordinario: asuntos de mayor cuantía (superior a 15.000€) o complejidad.
- Juicio verbal: asuntos más sencillos o de menor cuantía (no exceda 15.000€).
También se diferencian en la estructura:
- El juicio ordinario incluye audiencia previa.
- El juicio verbal va directamente a la vista.
En cuanto a sentencia:
- Verbal → 10 días.
- Ordinario → 20 días.
Tabla comparativa: juicio ordinario y juicio verbal
A continuación, una tabla resumen con las diferencias esenciales según la información disponible:
| Elemento | Juicio ordinario | Juicio verbal |
|---|---|---|
| Complejidad típica | Asuntos de mayor cuantía o complejidad | Asuntos de menor cuantía o mayor sencillez |
| Cuantía | > 15.000 € o por materia (art. 249) | ≤ 15.000 € (salvo materias del art. 249) |
| Audiencia previa | Sí | No |
| Vista o juicio | Tras la audiencia previa | Puede no haber vista si el tribunal la considera innecesaria; si la hay, se cita y celebra con plazos del art. 440 |
| Plazo para sentencia | 20 días desde terminación del juicio | 10 días desde la vista o acto correspondiente |
| Regulación legal | Ley de Enjuiciamiento Civil (Ley 1/2000, de 7 de enero) | Ley de Enjuiciamiento Civil (Ley 1/2000, de 7 de enero) |
Excepciones, suspensiones y advertencias
Los plazos procesales no siempre avanzan de forma lineal.
Pueden verse afectados por distintas circunstancias.
Supuestos que pueden alterar los plazos
Los tiempos del juicio civil pueden verse modificados por:
- Suspensión del procedimiento.
- Acumulación de autos (cuando se tramitan procedimientos relacionados).
- Incidentes procesales que obligan a resolver cuestiones previas.
En estos casos, el desarrollo del procedimiento puede ralentizarse, aunque la finalidad de la ley sigue siendo evitar dilaciones injustificadas.
Incumplimiento de plazos y consecuencias
El incumplimiento de los plazos por parte de las partes o incluso del propio tribunal puede generar efectos procesales relevantes.
Entre ellos:
- Preclusión de actuaciones (pérdida de la posibilidad de hacer algo fuera de plazo).
- Eventuales responsabilidades disciplinarias cuando el incumplimiento sea imputable a quienes integran la administración de justicia.
Por eso, la observancia de los plazos es esencial para el buen funcionamiento del proceso y la protección real de los derechos en juego.
Preguntas frecuentes sobre el juicio civil en España
Depende del tipo de procedimiento y del cumplimiento de plazos, pero la ley fija 10 días para sentencia en verbal y 20 en ordinario.
Demanda, admisión, contestación, audiencia previa (si procede), vista y sentencia.
10 días en juicio verbal.
20 días en juicio ordinario.
Pueden verse afectados por suspensiones, incidentes o acumulación de autos.
La Ley de Enjuiciamiento Civil (Ley 1/2000, de 7 de enero).
Conclusión
El juicio civil en España avanza a través de fases ordenadas reguladas por la Ley de Enjuiciamiento Civil, que garantiza celeridad y seguridad jurídica.
Las fases incluyen demanda, contestación, audiencia previa (cuando procede), vista y sentencia.
Los plazos más relevantes son:
- 10 días para dictar sentencia en juicio verbal.
- 20 días para dictar sentencia en juicio ordinario.
Conocer estas fases y tiempos permite entender mejor el funcionamiento del proceso civil y la tutela judicial efectiva.

RRYP Global, abogados de derecho civil.

